Seis jóvenes dieron su sí definitivo al Señor
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En el día en que celebramos el 127 aniversario de la pascua de nuestra Beata Madre María Encarnación Rosal, cinco jóvenes guatemaltecas y una salvadoreña realizaron su profesión perpetua. Ana Roselia López Chipix y Lesvia Elizabeth Xico Xicay, guatemaltecas, dieron su sí definitivo al Señor a las 10am en la capilla de la Posada Belén, La Antigua Guatemala acompañadas por sus comunidades de La Antigua (Instituto Indígena Nuestra Señora del Socorro de La Antigua, Colegio Belén y Posada Belén) y del Instituto Indígena Nuestra Señora del Socorro, de San Andrés Semetabaj, Sololá, hermanas de otras comunidades, sus padres, familiares, amigos y algunos sacerdotes. Por su parte, en la capilla del Colegio del Sagrado Corazón de Jesús, en Cartago, Costa Rica, Sandra Beatriz Valdez Villela, guatemalteca, Nely Melina López Raxtún, guatemalteca, Doris Marlene Álvarez Caballero, salvadoreña y Aura Marina Cumes Yaquí, guatemalteca, hicieron sus votos perpetuos acompañadas de sus comunidades de Casa Betania, Casa Provincial y Colegio del Sagrado Corazón de Jesús, Cartago, hermanas de las comunidades de Costa Rica, sus padres, familiares, amigos y algunos sacerdotes.
Que el Señor, por intercesión de nuestra Madre Encarnación la gracia de la perseverancia gozosa en el seguimiento de Jesús.
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La Posada Belén es una casa de retiros, encuentros, seminarios y conferencias, administrada por las Hermanas Bethlemitas y ubicada en la Calle del Hermano Pedro, Plazuela Belén, La Antigua, Guatemala. Acogemos a personas, grupos, movimientos y organizaciones, que buscan descansar, reunirse, reflexionar o capacitar a su personal o miembros.
imos fraternal y gozosamente a la Hermana Superiora y Directora María del Carmen Gómez, comunidad Bethlemita, personal docente, administrativo y de apoyo, padres y madres de familia, alumnado exalumnos-as del Colegio del Sagrado Corazón de Jesús, Chinandega, Nicaragua, autoridades eclesiásticas y civiles y a la sociedad chinandegana en Acción de gracias a Dios por el Centenario de tan querida Institución educativa, que ha forjado a tantas generaciones de nicaragüenses a lo largo de todos estos años. Agradecemos tanto a los fundadores Monseñor Canuto Reyes, obispo de León y su hermana María de la Paz Reyes, superiora y comunidad como a las diferentes hermanas y personal del Colegio que en estos 100 años han hecho historia.